Alberto Redondo, director de Marketing de Seres y presidente de la Comisión de Factura Electrónica de AMETIC, comentó que en todas las presentaciones y jornadas que vienen celebrando sobre el tema durante los últimos seis meses las preguntas que surgen son las mismas. Como Phil Connors en un eterno Día de la Marmota. Y lo explicó con un símil: el salto de la máquina de escribir al ordenador que ha modificado para siempre nuestro día a día. “Es un cambio de paradigma y como tal no genera duda, sino miedo”, afirmó.
Utilizar la factura electrónica significa pasar de un operador postal a otro electrónico, paso que ya hemos dado en otras facetas de nuestra vida (¿alguien echa de menos ese mueble en el espacio de honor del salón, o en la empresa, con las felicitaciones de Navidad?), por no hablar de nuevos hábitos de lectura, libro electrónico mediante.
La factura electrónica añade una variable: es máquina a máquina. Las máquinas dirimen a qué departamento va cada factura, previa inclusión de un código que otorgan los departamentos de contabilidad. Es decir se gana en eficiencia, porque las facturas estarán aprobadas de antemano, y se gana en transparencia al permitir conocer el ciclo de vida de las facturas y mayor control de los pagos y de la morosidad. Habrá menos probabilidades de fallos humanos y menos puestos de trabajo para humanos, o menos puestos en los que los humanos ejerzan de máquinas. Es una oportunidad para ir más allá de lo que exige la ley e intentar construir un país a partir del conocimiento y de una mayor demanda de trabajos cualificados. La interoperatividad está garantizada –aseguran-, diferentes entornos tecnológicos no afectarán al intercambio de facturas y existen soluciones gratuitas que permiten cumplir con el proceso.
El 25 de noviembre Redondo podrá despedirse de la marmota. Ha habido muchos eventos, dice, este es el colofón. Y lo que lo diferencia del resto es que se contará la experiencia de empresas que ya las están utilizando.
El Congreso de Factura Electrónica se podrá seguir en directo desde la página oficial del congreso, donde también es posible descargar el programa.
Mas información sobre la factura electrónica: FACe – Punto General de Entrada de Facturas Electrónicas de la AGE, en el portal de la administración electrónica